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¿Cuáles son los aprendizajes esperados en el área de desarrollo personal y social relacionados con la danza?
La danza es una forma de expresión artística que involucra el movimiento del cuerpo en armonía con la música y el ritmo. Más allá de ser una actividad física, la danza tiene múltiples beneficios en el desarrollo personal y social de quienes la practican. A continuación, se describen algunos de los aprendizajes esperados en el área de desarrollo personal y social relacionados con la danza.
Autoestima y confianza en sí mismo: La danza es una forma de expresión que permite a los bailarines conectarse con su cuerpo y emociones. Al practicar danza, se aprende a sentir y a expresar emociones de forma segura, lo que puede mejorar la autoestima. Además, la repetición de los movimientos y el trabajo en equipo fomentan la confianza en sí mismo y en los demás.
Respeto y tolerancia: En un ambiente de danza, es fundamental el respeto y la tolerancia hacia los demás. El trabajo en equipo y la colaboración con otros bailarines fomenta la empatía y la comprensión de las necesidades de los demás. El respeto se extiende a la música, los ritmos y los movimientos, aprendiendo a valorar la diversidad cultural.
Disciplina y perseverancia: La danza requiere de mucha disciplina y perseverancia. Los bailarines necesitan trabajar constantemente para mejorar su técnica y habilidades. La perseverancia es fundamental para superar los momentos de frustración y poder seguir adelante con la práctica.
Creatividad y expresión artística: La danza es una forma de expresión artística que permite a los bailarines desarrollar su creatividad y originalidad. Los movimientos y la interpretación de la música pueden ser trabajados y adaptados para crear nuevas coreografías y formas de expresión.
Comunicación no verbal: La danza es una forma de comunicación no verbal en la que los movimientos y la puesta en escena transmiten emociones y sensaciones. Los bailarines aprenden a comunicarse y a conectarse con su público a través de su expresión corporal.
Coordinación y equilibrio: La danza requiere de una buena coordinación y equilibrio para lograr ejecutar los movimientos de manera precisa y armónica. La repetición de los movimientos y el trabajo en técnica ayudan a mejorar estas habilidades.
- En resumen, la danza es una actividad que puede aportar grandes beneficios al desarrollo personal y social de quienes la practican. La autoestima, confianza en sí mismo, respeto, tolerancia, disciplina, perseverancia, creatividad, comunicación no verbal, coordinación y equilibrio son algunos de los aprendizajes esperados en el área de desarrollo personal y social relacionados con la danza.
- Estos aprendizajes pueden ser aplicados en otros aspectos de la vida, como en el ámbito académico, laboral y personal.
- Por lo tanto, se debe fomentar el aprendizaje de la danza en las escuelas y en la sociedad en general, como una forma de desarrollar la creatividad, el autoconocimiento y la integración social.
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